CONTENIDO

01

La psoriasis es contagiosa

Falso

La psoriasis es una enfermedad inflamatoria, en la que las células de defensa del cuerpo están sobre activadas. Para que se dé esa activación inmunológica debe haber una predisposición genética y un estímulo, interno o externo, que desencadena la enfermedad. Dentro de los estímulos que pueden iniciar la psoriasis se encuentran: las vacunas, algunas infecciones, la contaminación, el tabaquismo, el consumo de alcohol, la obesidad y el estrés.

La psoriasis no es una enfermedad infecciosa y por lo tanto no puede transmitirse por el contacto entre personas.

02

La psoriasis es una enfermedad solo de la piel

Falso

La psoriasis es una enfermedad inflamatoria que suele manifestarse inicialmente en la piel, pero que afecta a muchos sistemas del cuerpo.

Puede presentarse como dolor e inflamación de las articulaciones, en la artritis psoriásica. Como dolor abdominal, pérdida de peso involuntaria y sangrado en las deposiciones en la enfermedad inflamatoria intestinal. Como ojo rojo, dolor ocular o molestia exagerada al sol en la uveítis. Como dolor en el pecho o sensación de ahogo en la enfermedad cardiovascular. O como sensación de angustia o tristeza en la ansiedad y depresión.

Todo esto se da, porque las sustancias inflamatorias que causan los síntomas en la piel (engrosamiento, descamación, enrojecimiento y picazón), son las mismas que inflaman otros órganos del cuerpo como el corazón, el intestino, los ojos y el cerebro. Si tienes alguno de estos síntomas y sufres de psoriasis, recuerda mencionarlos a tu médico tratante.

03

La psoriasis es siempre igual

Falso
La psoriasis puede manifestarse de diversas formas en la piel, desde pequeñas pápulas o placas rojizas y descamativas, limitadas a una localización, hasta grandes placas que comprometen gran parte de la superficie corporal. Entre las principales están:
-Psoriasis vulgar o en placas:
Es el tipo más común. Son placas rojizas o eritematosas, con una descamación gruesa, bien delimitadas que afectan principalmente a los codos, rodillas, región lumbosacra, manos y pies.
En pieles oscuras las placas no suelen verse rojas, si no que adquieren una coloración violácea y la descamación puede ser más blanquecina. 
Psoriasis en gotas o “guttata”
Son más frecuentes en niños y adolescentes. Puede ser de rápida aparición y son pápulas eritematosas y descamativas puntiformes y hasta de 1 cm, localizadas en el tronco y las extremidades (respetan palmas y plantas).
Psoriasis inversa

Son placas bien delimitadas, rojizas, brillantes, con descamación mínima o ausente, localizadas en pliegues axilares, inguinales, inframamarios, interglúteo y genitales.

Psoriasis ungular

El compromiso de las uñas es relativamente frecuente. Clínicamente se manifiesta según la zona afectada del aparato ungular. Se puede observar depresiones puntiformes u hoyuelos, líneas transversales, separación de la uña, coloración color salmón o blanquecina, engrosamiento de la uña o destrucción total de ésta, entre otras.

Video Psoriasis Ungular

Psoriasis del
cuero cabelludo

Es una de las localizaciones más frecuentes, puede darse de forma aislada o con afectación de otras áreas del cuerpo. Se observan placas eritematosas con escamas gruesas blanco-amarillentas adheridas al pelo. Se pueden extender a la frente, la zona retroauricular y la nuca​.

Psoriasis
palmoplantar

Son placas eritematosas con descamación gruesa en palmas y plantas, que pueden fisurarse, ocasionando dolor y dificultad para la movilidad. Puede darse de forma aislada o con afectación de otras áreas del cuerpo.

Psoriasis
eritrodérmica

Es una presentación inusual. Se observa una coloración rojiza y descamación generalizada que afecta casi la totalidad de la superficie corporal.

Psoriasis
pustulosa

Es una forma infrecuente. Se observa una coloración rojiza de la piel, descamación y múltiples pústulas (vesículas con contenido de pus). Puede ser localizada (generalmente afectando palmas y plantas) o generalizada.

04

La psoriasis nunca se cura

Verdadero

La psoriasis es una enfermedad crónica, que hasta el momento no tiene cura, sin embargo, con las diferentes opciones de tratamiento existentes, se puede lograr un óptimo control.

Existen ciertos factores que pueden desencadenar o empeorar la enfermedad, los cuales varían de persona a persona, pero, los más comunes son:

Infecciones

Estrés emocional

Traumatismos o heridas en la piel 

Clima frío y seco

Tabaquismo

Alcohol

Algunos medicamentos

05

Todos los pacientes con psoriasis deben recibir el mismo tratamiento

Falso

Lo más importante es comprender que el tratamiento es individualizado a cada paciente, tras una valoración por el dermatólogo.

Se deben considerar diferentes aspectos:
-Gravedad de la enfermedad
-Compromiso de la calidad de vida
-Enfermedades asociadas del paciente
-Recursos disponibles

Tópicos

Aplicación de medicamentos en forma de cremas, ungüentos, lociones, geles o champús en las lesiones de psoriasis. Es la primera línea de tratamiento en la psoriasis leve y un complemento para las formas moderadas o graves. También incluyen productos que ayudan a mejorar la descamación y humectación de la piel.

Fototerapia

Es la aplicación de radiación ultravioleta con intención de controlar el sistema de defensa. Hay diferentes aparatos que actúan de forma focal, parcial o total sobre la piel. Por lo general, requiere de 2-3 sesiones semanales y no es una opción disponible en todos los centros de atención.

Orales

Son medicamentos tomados y se usan en casos moderados a graves. Tienen intención de controlar el sistema inmune o de defensa, o disminuir el proceso de descamación y engrosamiento de las placas de psoriasis en la piel.

Van a requerir la realización de exámenes antes de su inicio y en algunos controles determinados. El buen funcionamiento de órganos como el hígado y los riñones es fundamental durante el tratamiento con estos medicamentos.

Inyectables

Se usan en la enfermedad moderada-grave que no ha respondido a otras terapias. Tienen diferentes mecanismos de acción y esquemas de aplicación que van desde uso semanal hasta trimestral y esta suele ser de forma subcutánea.

Según cada caso, los diferentes tratamientos pueden combinarse en un mismo paciente.

Se recomienda vigilar y tener actualizado el esquema de vacunación, especialmente antes de iniciar tratamiento oral o inyectable.

El tratamiento también incluye medidas no farmacológicas como una dieta sana, realizar actividad física, dormir bien, evitar consumo de alcohol y tabaco, manejo del estrés y apoyo emocional y psicológico.

Es importante que los pacientes no se automediquen, cumplan con las recomendaciones médicas, realicen los exámenes solicitados y asistan a las citas de seguimiento.